Un fariseo invito a Jesus a comer, asi que fue a su casa y se sento a la mesa. Ahora bien, vivia en aquel pueblo una mujer que tenia fama de pecadora. Cuando ella se entero de que Jesus estaba comiendo en casa del fariseo se presento con un frasco de alabastro lleno de perfume. Llorando, se arrojo a los pies de Jesus, de manera que se los bañaba en lagrimas. Luego se los besaba y se los ungia con el perfume.
Al ver esto, el fariseo que lo habia invitado dijo para si: Si este hombre fuera profeta, sabria quien es la que lo esta tocando, y que clase de mujer es: una pecadora.
Lucas 7:36-39
El fariseo juzgaba a la mujer por sus acciones, (por su exterior) Jesus lo que veia era su corazon. El quebrantamiento del alabastro, era el mismo que su corazon derramado ante sus pies.
Para agradar a Dios debemos estar dispuestos a no agradar a los demas, a veces tendremos que exponernos a ser juzgados, criticados, rechazados, por esforzarnos hasta llegar a su presencia.
A sus pies hay descanso, paz y Bendicion.
A sus pies hay perdon, sanidad, restauracion.
Alguna vez te has preguntado, que clase de perfume saldra de tu interior?..
Que ofrenda puedes traer ante su presencia?...
Que estas dispuesta a dar, a derramar ante su presencia?..
Derramemos nuestro propio perfume a sus pies?...
Que el quebrantamiento de tu corazon, sea lo que Jesus vea cuando vienes ante su presencia.
Rendirnos a sus pies es la mejor postura, para poder estar de pie frente ante el mundo.
No pierdas la oportunidad que tienes cada dia, de rendirte a sus pies!
BeNDeCiDA!